Dres. Ojeda
Imagen Diagnóstica de Alta Especialidad.
Es una técnica especializada de rayos-X, que se utiliza para medir la densidad mineral del hueso, o lo que es lo mismo, su contenido en calcio. Se utiliza para diagnosticar la osteoporosis y otro tipo de enfermedades en las que se puede determinar el riesgo de un individuo a sufrir fracturas de hueso.
Gracias a esta prueba podemos valorar la salud de nuestros huesos, llevar un control de la pérdida ósea que podamos sufrir con el transcurso de los años y controlar cuál es la respuesta de nuestros huesos a un tratamiento. Además, permite detectar en una fase temprana una enfermedad tan dañina como la osteoporosis e instaurar un tratamiento en la fase inicial de dicha patología. Se suele practicar en las caderas en la parte inferior de la columna vertebral (zona lumbar).
La densitometría ósea ayuda al médico a predecir el riesgo de fractura ósea que
puede sufrir un paciente durante un determinado periodo de tiempo. Si una persona
presenta una densidad mineral ósea claramente disminuida con respecto a los valores
normales para su edad y sexo, puede afirmarse que la probabilidad que tiene para su
sufrir una fractura en sus huesos es mayor.
Entre las personas que presentan un
riesgo mayor de desmineralización ósea se encuentran:
Además, otros factores de riesgo para padecer osteoporosis son: ser mujer de raza blanca; tener antecedentes familiares de osteoporosis; llevar una ingesta pobre en calcio a lo largo de la vida; haber tenido una menopausia precoz; ser sedentario; realizar una ingesta excesiva de alcohol, de café y fumar.
La prueba dura entre diez y treinta minutos, en función de las partes del cuerpo que
pretendan examinarse y de la tecnología que se utilice. Para el diagnóstico de
osteoporosis, se suelen explorar las caderas y la zona lumbar, midiendo el contenido
óseo de las vértebras L2, L3 y L4 y el cuello del fémur.
El día de la prueba puede comer normalmente. No se debe haber tomado ningún
suplemento de calcio en las
24 horas anteriores y se puede acudir confortablemente vestido evitando complementos
que tengan objetos metálicos, como hebillas, cremalleras, etcétera, pues no
se pueden portar en la zona del escáner.
El paciente debe tumbarse boca arriba sobre la camilla, y permanecer relajado y lo
más quieto posible. En esta posición, el escáner pasa sobre todo el cuerpo,
emitiendo una radiación con dosis bajas de rayos-X, en torno a la décima parte de la
que se usa para una placa de tórax. El aparato toma una radiografía en la parte baja
de la columna y de la cadera, sin necesidad de desvestirse. Existen ya equipos
portátiles capaces de medir la densidad ósea en la muñeca o en el talón, y que se
utilizan en centros de atención primaria.
La realización de la técnica es rápida y no supone ninguna molestia para el
paciente, salvo la necesidad de permanecer quieto durante su ejecución.
Generalmente, se suele realizar densitometrías de control cada dos años para
observar la evolución de la pérdida de mineral óseo y la respuesta a un tratamiento.
La densitometría es incapaz de predecir quién va a desarrollar una fractura ósea, pero sí puede indicarnos el riesgo relativo que presenta un individuo. En aquellos pacientes que tengan alguna deformidad espinal, artrosis u otra patología vertebral se pueden producir resultados imprecisos.
Beneficios
La densitometría ósea de DXA es un procedimiento simple, rápido y no invasivo. No se requiere anestesia.Riesgos
Siempre existe una leve probabilidad de tener cáncer como consecuencia de la exposición a la radiación. Sin embargo, dada la pequeña cantidad utilizada en las imágenes médicas, el beneficio de un diagnóstico exacto supera ampliamente el riesgo asociado.